Cuando cocinamos al vapor los alimentos conservan mejor su sabor, color, forma… Es una de las formas más recomendables de preparar los vegetales, para así aprovechar todos los beneficios que tienen. Además, se trata de una forma muy sencilla y rápida de preparar las verduras y hortalizas que más nos gustan.
Paso1: Limpiamos la coliflor, pedimos a un ayudante adulto que le quite el tallo y la vamos desflorando con las manos para que quede en floretes pequeños.
Paso2: Limpiamos el brócoli y lo vamos separando con las manos en floretes pequeñitos.
Paso3: Le pedimos a nuestro ayudante que pele las zanahorias y las patatas, las lavamos y le damos instrucciones para que corte las patatas en cubos y las zanahorias en bastones.
Paso4: Pedimos a nuestro ayudante que ponga agua a hervir en una olla y colocamos con su ayuda la vaporera sobre la olla.
Paso5: Disponemos las verduras en la vaporera y las dejamos cociéndose al vapor durante unos 25 minutos o hasta que estén al punto deseado.
Paso6: Añadimos sal, pimienta negra molida y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
¿Cómo hacemos la carne?
Paso1: Lo primero que tenemos que cuidar a la hora de hacer la carne, es vigilar muy bien la temperatura de la sartén. No debemos poner la carne cuando la sartén está fría, ya que lo que vamos a conseguir es que la carne se cueza poco a poco y quede mucho más dura. Por eso, debemos hacerlo cuando esté caliente y empiece a dorar los exteriores de la carne desde el primer segundo. Lo mejor es usar sólo una pizca de aceite en la sartén dejando que se haga prácticamente a la plancha. Estaremos pendiente de todos estos detalles mientras nuestro ayudante va preparando la carne.
Paso2: Por otro lado, durante el proceso no debemos hacer cortes en la carne, ya que, si lo hacemos, perderá gran parte de su jugo, quedando más seca.
Paso3: Otro truco es no poner la sal con mucha antelación en la carne ya que la sal absorbe todos los jugos naturales de la carne y la deja muy seca. Lo mejor es echar la sal justo antes de freír, o mejor, justo después de sacarla de la sartén.
¿Cómo hacemos el pan?
Paso1: Dependiendo del tipo, del grosor del pan y de lo dorado o crujiente que quieras que quede, tenemos que poner la tostadora a una temperatura más alta o más baja. Nuestro ayudante adulto nos podrá dar una orientación según el tipo de tostadora que estemos utilizando. Lo mejor será empezar con una temperatura baja para asegurarnos de no quemar la tostada, luego si necesitas tostarla nuevamente, repite el proceso, lo importante es que quede con un color dorado y no quemada.
Una vez terminados todos los pasos, emplatamos la tosta, colocando sobre el pan las verduras al vapor ya aliñadas y, por último, la carne recién hecha. ¡Lista para comer!
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